Las redes sociales han revolucionado la fama, permitiendo que personas comunes se conviertan en figuras mediáticas influyentes. Un claro ejemplo es la influencer Lola Moreno, conocida como Lola Lolita, quien ha pasado de crear contenido en TikTok e Instagram a consolidarse como referente en el mundo del entretenimiento.
Con más de 17 millones de seguidores en sus plataformas, Lola ha logrado trascender su éxito digital al colaborar con grandes marcas como L’Oréal, desfilar en la Semana de la Moda de París y debutar en televisión en programas como El Hormiguero y El Desafío de Antena 3. Su ascenso confirma el impacto de las redes en la creación de nuevas figuras públicas y su influencia en la industria del entretenimiento.